Por Fausto Triana
Madrid, 13 ago (Prensa Latina) La inyección de dos mil 700 millones de euros y la firme oposición del Real Madrid y el Barcelona, son las pinceladas del arranque del proyecto «LaLiga Impulso», sin Leo Messi.
Cosas del fútbol, esta noche comienza el torneo que un tiempo atrás era la delicia de los campeonatos nacionales de clubes de Europa. Ya no tanto, porque se fueron Cristiano Ronaldo, Neymar, Sergio Ramos y ahora Lionel Messi.
Finanzas maltrechas, un poco por manejos desacertados de los clubes, y otro ante la crisis mundial como consecuencia del nuevo coronavirus, pusieron en tensión a LaLiga Santander resentida en particular por el adiós del argentino.
Recomponiendo el panorama, o al menos así se lo planteó, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, alcanzó un acuerdo con el fondo de inversiones CVC en un plazo de 50 años, algo duramente criticado por el Madrid y el Barcelona.
Sin embargo, el multimillonario proyecto consiguió luz verde ayer jueves y «LaLiga Impulso» fue adoptada con una amplia mayoría en la votación realizada durante la Asamblea Extraordinaria, con 38 votos a favor.
El arreglo se compuso entre LaLiga y el fondo de inversión internacional CVC la pasada semana para inyectar dos mil 700 millones de euros en la competición y los clubes, que mayoritariamente vieron las cuentas arregladas.
En paralelo, el inicio del certamen de momento no avizora buenas sensaciones. Al margen de la partida de Messi, y antes de Zinedine Zidane, Sergio Ramos y Raphael Varane, el Covid-19 no ha ayudado a los entrenamientos.
Tampoco los Juegos Olímpicos de Tokio y en general las vacaciones veraniegas, al tiempo que España se enfrenta en estos momentos a una intensa ola de calor que no ayudará en los estadios.
Eso sí, la autorización a que las instalaciones puedan contar con público, en un 30 por ciento de la capacidad del aforo, es una luz de esperanza paa la recaudación de fondos.
No han sido años gloriosos para la Liga Santander en los últimos tiempos, que tampoco ha ganado Champions League ninguno de sus clubes estrellas, Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid.
Lo deportivo, condenado por ahora a un segundo plano, a mediano plazo será otro quebradero de cabezas para la LaLiga, a menos que antes del 31 de agosto se hagan fichajes relevantes.
El más hablado ha sido el del francés Kylian Mbappé ante el ansia del real Madrid, pero el jugador parece anclado en el París Saint Germain, sobre todo por el jalón de orejas público que le hizo el presidente del club Nasser Al-Khelaifi.
Con el arribo de Messi, el magnate qatarí cree que las ambiciones competitivas de Mbappé pueden estar más que satisfechas.